Vaya suerte la tuya
habiendo tanta posada
despertar en la cuna
y escuchar mi guitarra.
Vaya suerte la tuya,
cien millones y ahora
te tocó ser escucha
de mis canciones locas.
Vaya suerte la tuya,
sé que no imaginabas
competir con la luna
y ser la luz de mi casa.
Vaya suerte la tuya
y es que estás condenado
a vagar por mi sueño
y al calor de mi mano.
Vaya suerte la tuya
ser retoño de un loco
que imagina y escucha
la alegría de todos.
Vaya suerte la tuya,
pero al fin, bienvenido
que tu bien es mi lucha
y el amor tu destino.