Vaya suerte la tuya habiendo tanta posada despertar en la cuna y escuchar mi guitarra. Vaya suerte la tuya, cien millones y ahora te tocó ser escucha de mis canciones locas. Vaya suerte la tuya, sé que no imaginabas competir con la luna y ser la luz de mi casa.
Vaya suerte la tuya y es que estás condenado a vagar por mi sueño y al calor de mi mano. Vaya suerte la tuya ser retoño de un loco que imagina y escucha la alegría de todos. Vaya suerte la tuya, pero al fin, bienvenido que tu bien es mi lucha y el amor tu destino.