Como en sueños tu mirada abierta puerta de tu alma descubierta. Imposible que me culpes nada la verdad resbala por tu cara. Pues ve el reflejo como un lago en calma me regresas pura realidad, pero nunca dices con tus ojos nada de lo que quisiera yo escuchar. Una sabana en la hoguera de una lluvia contra tu cadera. Una tarde de caballos arrancando de tu boca un rayo.
Más que un lago yo prefiero quedar ciego por mirar el sol Es la paz lo que en mi piel encalla en vez de torbellinos en mi playa agradezco tus buenos consejos, tus deseos, tus ojos de espejo. Pues te reflejo como un lago en calma, me regresas la tranquilidad, pero yo que diera porque me dijeras con tus ojos una tempestad.