Cada vez que quiero hablar Cada vez que quiero respirar apareces tú Entre besos y caricias, entre el llanto y la sonrisa Sólo vives tú Siento que te quiero tanto Siento que me estoy fallando al pensar en ti Yo no puedo ser tu dueño, No, no puedo ser tu dueño Y aún te espero, aún te quiero Entre las hojas de las rosas duelen las espinas Y ya no se muy bien para qué Aún te espero, aún te quiero Y me pregunto cada noche, mira qué ironía Por qué soñé alguna vez. Sólo aquí sin preguntar Dónde encontrarán lugar los sueños que no pueden ser No le robaré el sentido al olvido Si me digo que te quiero ver Y te nombro en un suspiro Y te encuentro aquí conmigo al amanecer Sé muy bien que me hace daño Sé que se me van los años Yo quiero ser tu hombre alguna vez.