Yo te abrí Las puertas de mi alma Y así la usaste a tu voluntad Si fue el horóscopo,o mi destino. Yo no sé bien, Pero me hiciste mal. Yo interpreté Las líneas de mi mano, Quizá el oeste marcaba tu imán, Encomendada a mi ángel De la guarda, te hice la cruz, Pero no va más. Ya no podía esperarte, Si aparte te me caíste de mi pedestal. Eras mi enfermedad, Mi veneno mortal, La presión arterial Que va subiendo. Eras mi irrealidad, Todo el bien, todo el mal, Tanta debilidad que nos mata por dentro. Tú me decías mentiras piadosas, Que yo aceptaba por comodidad, Pero igual que el agua desgasta Las piedras me quité la venda Y vi la realidad. Ya no podía esperarte, Si aparte te me caíste de mi pedestal. Eras mi enfermedad, Mi veneno mortal, La presión arterial Que va subiendo. Eras mi irrealidad, Todo el bien, todo el mal, Tanta debilidad que nos mata por dentro. Eras mi enfermedad, Mi veneno mortal, La presión arterial Que va subiendo. Eras mi irrealidad, Todo el bien, todo el mal, Tanta debilidad que nos mata por dentro.