No pienso nunca abandonarte, me sentiré partido en dos, aunque ya no pueda besarte, sabes que existe algo más. Eres tan importante, que mi vida gira por ti, sé que soy muy complicado, algo difícil de llevar. Momentos que se pierden con el tiempo y aparecen otras veces sin querer, lamentos que conviven con recuerdos de esos niños que aprendieron a querer. No pienso nunca abandonarte, me sentiré partido en dos.