Fueron tantos los guitarras, sus secretos les quité al dormir, influencias que aparecen descubriendo a qué colegio fuí. Cómo un árbol toma luz para crecer, es verdad, que una ley es justa si es ley natural. Una historia Del principio Cuando uno se creia el mejor, daba miedo el viejo lobo afirmando que él era el peor. Yo era uno más que un día aprendió de otro más, encontré un grosor de púa y un sonido fiel, luego es tener uno mismo una forma muy propia de hacer, tocar sonar. ¡Oigo guitarras, quiero guitarras, suenan guilarras, oigo guitarras! Hoy hay tantas ocasiones de escuchar y dar un paso más, las palabras, las canciones, descubrir a qué colegio vas. Como flor que atacara la belleza de la luz, dije ¡si! a la flora y fauna, mi planeta azul, todo es luchar y encontrar una forma muy propia de hacer, sonar, tocar ¡Oigo guitarras, quiero guilarras, suenan guitarras, oigo guitarras, por todos lados...!