Cuando vuelva el tiempo de las flores y la miel,
y comprendas amor mío que te he sido fiel.
llámame, yo te esperare.
Cuando los aromos tejan el color del sol,
y te duela una mañana que nadie te de una flor.
llámame, yo te esperare.
Cuando pasen esos días grises,
y te canses de la soledad:
y te hagan llorar lo que perdiste,
cuando estés cansada de buscar:
llámame... llámame...
Cuando creas que es posible volver a empezar,
cuando veas que aun existen motivos para regresar.
llámame, yo te esperare.