No falta nada en la estructura del smog. Los zapatos viejos y las caras oxidadas, las máquinas rugen feroces sobre Antonio Caso. Sombras que entran y salen oliendo a cerveza. Clavado en una idea volteo a ver si aterrizas, me asomo al reloj y es más que un calendario. Sospecho que allá afuera sólo hay desconocidos, figuras de cera que pasan sin decir tu nombre. No, no hay manera de regresar la cinta. Tu amor fue un rock en vivo, dos, tres manchas de tinta, un requinto de jazz, fugaz e improvisado, una imagen en el aire de un pintor apresurado.
Ya todo es esquema desde que partió tu barco. Máquinas, sistemas, estructuras; sin embargo, un acorde vuela me platica de una isla y un navegante herido para tras tus ojos. Traigo en mi entraña, un pedazo de aerolito me doy algo de maña, pero no me comunico. Un viajero me ha dicho que navegas lejos. En busca de tierras ajenas calor y azulejos. No, no hay manera, de regresar la cinta. Tu amor fue un rock en vivo, dos, tres manchas de tinta, un requinto de jazz, fugaz e improvisado, una imagen en el aire de un pintor apresurado.