Quiero saber con quién tengo el placer, de empezar esta nueva amistad, tengo que serte sincero pues de un laberinto me acabo de escapar. Ella me tuvo atrapado como un prisionero sin agua ni pan. Sé que volver a empezar es difícil pero eres mi tabla en el mar. Oh, oh, oh, oh, oh, tengo el corazón fracturado. Oh, oh, oh, oh, oh, y tú lo puedes remendar. Oh, oh, oh, oh, oh,
tengo la mente tan enredada, Oh, oh, oh, oh, oh, y tú la puedes desenredar. Quiero olvidar el impulso que desde el principio a ella me llevó. Ahora lo veo tan claro estaba en huelga su entrega de amor. Respeto mejor como das tu amor un cheque y a pagar al portador. Si a tí no te hubiese encontrado, en su laberinto me hubiera desgastado.