Viernes son las doce, y yo estoy que me duermo,
tanto fumeteo que me ha entrado el muermo.
Tomaremos otra, que es viernes por la noche,
siempre me dejan sopa dentro del coche.
A las cuatro de la mañana ¿donde se habrán metido?
Que me estoy meando, que estoy muerto de frío,
no sé donde estoy, ¿de quien es el coche rojo?
Que me fui a mear y al volver me metí en otro.
Solo fui a mear, y casi acabo en la comisaría.
Solo fui a mear, y me metí en un coche un policía.
Me tiré a dormir, a ver si vienen pronto,
la puerta se abrió y se metió un maromo
salimos de allí en un momento zumbando,
le dije, ¡colega! ¿Por que habeis tardado tanto?
Cuando mira para atrás emtió un grito de espanto,
me sacó del coche a empujon y puñetazos,
Yo traté de explicar como había pasado todo,
como iba a saber que el coche era de un mono.
Solo fui a mear, y casi acabo en la comisaría.
Solo fui a mear, y me metí en un coche un policía.
Yo le repetía y el ni puto caso,
que si abre bien las piernas, arriba las manos.
Todo es un error, hágame usted caso,
y es que por la noche
todos los gatos son pardos.
Menos mal que aparecieron, todos los colegas,
con el coche rojo igual que el del madero.
Él se echó a reir y me trajo una cerveza,
tío no me jodas, que no es pa sacar un tema.
Solo fui a mear, y casi acabo en la comisaría.
solo fui a mear, y me metí en un coche policía.