Oh... cuánto te quiero
Te extraño, mi amor, no tardes mucho tiempo
Al fin tranquilo en mi casa, sin mujer una semana
Dios ha escuchado mis plegarias y mi suegra está en cama
Por culpa de él no salgo nunca y si salgo es de enfermera
la última vez que fui al cine fui a ver 'La violetera', caradura
Me tiene aburrida, no hay quién lo mueva
Oh... cuánto te quiero
Te extraño, mi amor, no tardes mucho tiempo
Habla mil horas por teléfono y siempre la misma charla
que si Manuela está más gorda o si Cristina está más flaca
Para tener la casa limpia yo trabajo el día entero
y cuando él llega en un minuto la convierte en basurero
Le pido que me ayude y él no mueve un dedo
Oh... cuánto te quiero
Te extraño, mi amor, no tardes mucho tiempo
Para sacarle un centavo yo tengo que hipnotizarlo
tirarme al suelo de rodillas, suplicarle o robárselo
Con este asunto de la dieta comer en casa es un castigo
Ella no bajó ni un gramo y yo perdí ya cuatro kilos
La fiesta ya empieza, me voy con mis amigos
Oh... cuánto te quiero
Te extraño, mi amor, no tardes mucho tiempo
(Teléfono)
- ¿Hola?
- Soy yo, te llamo para decirte que ya voy para ahí
- Pero cómo, si te fuiste ayer
- ¿Qué tiene que ver? O estabas planeando algo...
- Yo...no. Qué voy a estar planeando. Pero, ¿y tu madre?
- Va conmigo para ahí
- ¡No!
- ¿No qué?
- ¿No será peligroso, a ver si tiene una recaída?
- No, no te preocupes por ella
- No, no. No me preocupo por ella, pero por qué tiene que venir
a instalarse justo aquí
- Porque está enferma y además son solamente tres o cuatro días
- Sí, sí. Tres o cuatro días. El año pasado por un resfrío se quedó un mes
- No fue un mes, fueron dos semanas
- Bueno, saca las cuentas. Si ahora llega a tener gastritis se queda a vivir...
- Bueno ¡basta! ¿La casa está ordenada?
- En realidad no esperaba que vin...
- ¿Me llamó alguien por teléfono?
- No, entre 200 y 300 personas nada más
- ¿Fuiste a comprar algo de comida?
- Hoy es domingo, está todo cerrado
- Ah, claro, y ahora qué le doy a mamá...
- Ya se te va a ocurrir algo...
- No empieces de nuevo, ¿eh?
- Yo no dije nada
- Ah, no, al final nos vamos a terminar peleando
- No será por culpa mía
- ¿Y entonces por culpa de quién?
- ¡Qué sé yo por culpa de quién!
- Ah, claro, seguro que estás pensando en mi madre
- Dios me libre
- Ah, ¿qué querés decir con eso?
- Nada, no quiero decir nada
- Sí, ya conozco tus frases con doble sentido
- Mis frases con doble sentido ¿y las tuyas?
- ¿Las mías qué? Ya no quiero seguir hablando...
Oh... cuánto te quiero
Te extraño, mi amor, no tardes mucho tiempo