Ella: Ella ponía alma y vida, miedo,
vergüenza y resignación...
El: El se encargaba de las heridas,
de los insultos y humillación...
Ella: Cuéntale al mundo lo que pasa,
El: No calles más tanto dolor,
El y Ella: Abre las puertas de tu alma,
Ella: Pide ayuda, por favor...
Ella: Ella esperaba, día tras día,
que algún milagro salve a los dos...
El: El le marcaba la otra mejilla
con la hebilla de un cinturón...
Ella: Cuéntale al mundo lo que pasa,
El: No calles más tanto dolor,
El y Ella: Abre las puertas de tu alma,
Ella: Pide ayuda, por favor...
Ella: Ella creía en sus promesas
hasta que todo se derrumbó...
El: Golpe tras golpe contra una mesa,
perdió el hijo que nunca vio...
Ella: Cuéntale al mundo lo que pasa,
El: No calles más tanto dolor,
El y Ella: Abre las puertas de tu alma,
Ella: Pide ayuda, por favor...
Ella: Cuéntale al mundo lo que pasa,
El: No calles más tanto dolor,
El y Ella: Abre las puertas de tu alma,
Ella: Pide ayuda, por favor...