Tus pechos recién nacidos, mis dedos recién nacidos. La casa, los bares, donde nos vimos y el sudor envuelto en piel. Tu cuerpo bebiendo el mío, mi cuerpo que ya ha bebido. Olores, paisajes, la lluvia, el frío y tus labios en mi sed. Eso quedará aunque caigan las hojas. Eso quedará aunque vuelva a vivir. Eso quedará amarrado a mi sombra. Eso quedará en mí.
Tus ojos como un espejo, mis ojos en tu reflejo. La playa, la luna, aquellos besos con olor a arena y sal. Tus años que eran tan pocos, mis años que eran tan pocos. El tiempo que pasa y el amistoso corazón que ya no está. Eso quedará aunque caigan las hojas. Eso quedará aunque vuelva a vivir. Eso quedará amarrado a mi sombra. Eso quedará en mí.