Había una vez en un pequeño país
donde alguna gente se sentía feliz.
Un alma chiquitita se quiso escapar,
pero no le daba para cruzar el mar.
Y le dijeron vas mal, muy mal,
eso no se hace, tenés que pensar
y pensar...
Con hambre no se puede pensar, no se puede.
Y esperó y esperó y el momento no llegó
con el correr del tiempo estaba cada vez peor
y cedió, tiraron de la cuerda y cedió
y ahora ya no hay vuelta atrás...
Todo vuelve a ir para atrás...
Ya no está consciente, atrás...
Y ahora ya no hay vuelta atrás
la realidad le miente.
Un alma chiquitita se quiso escapar
pero no le daba para cruzar el mar.
Y le dijeron vas mal,
muy muy mal
eso no se hace, tenés que pensar
y pensar...
Con hambre no se puede pensar
no se puede pensar.
Con hambre no se puede pensar
no se puede.