El corrió, buscando una ilusión que lo hiciera creer. No encontró un sitio adonde ir, en quien poner su fé. Engañado en este mundo no encontraba nunca su lugar mirando cómo el tiempo pasa pensando en los demás. No plantear que todo termina, ni por qué te dieron la vida. No hay lugar para la mentira debes ver. Solo tu verdad. Hasta que, cansado de esperar la seña que nunca llegó. Despertó, de un sueño sin final mirando a su interior. Lo que él había levantado,
ahora lo iba a derribar un muro lleno de presiones que asfixia y hace mal. Se sintió el hombre elegido se cubrió y fué decidido a pelear contra sus fantasmas. Defendió... Sólo su verdad, sólo la verdad más que una verdad es una verdad. Liberado de su abismo de la carcel que supo crear después de tanto y tanto tiempo su meta era real. Ahora sé, no importa el destino siempre que sigas tu camino no importó. El tiempo pasado comprendió. Que era su verdad.