Ahora ni el cielo te asiste, y no hay nadie desviviéndose por ti. Pero el ser humano insiste, justificas tu existencia con la química, estoy triste, ¿para qué mentir?. Haré que el sol salga mañana desde aquí y por una vez seré la más bella ciudad y seré ballena en altamar y seré la noche al descender. Por una vez seré una luz y una canción y seré la esfera de un reloj que no tiene agujas.
Resuelto ya el misterio, el futuro aúlla como un animal, y ahora el único silencio es aquel que me procuran ciertas drogas. Tengo miedo, ¿para qué mentir?. Haré que el sol salga mañana desde aquí y por una vez seré la más bella ciudad, y seré ballena en altamar, y seré la noche al descender. Y por una vez seré una luz y una canción, y seré la esfera de un reloj que no tiene agujas.