La tolerancia esiste. Se da. A lo más tardar, un día... Suave, serena y sin alarma, cuando aparece, su presencia hace posible entender, su evidencia, aceptar... Y dicen que esa es la puerta final, la que si se abre, da a la paz interior. Eso dicen. Que nada tienen que ver los años. Que está de Dios. De la mano de Dios... Hay días que vivir Y días que pasear Días de sol Hay días que es mejor Guardarse de pensar Días sin ti De la mano de Dios... Hay días que dormir Y no resucitar Como que no Hay días que tal vez
Y días que quizás Días no sé Y un día, cualquier día, un día habrá Como todos y como siempre de paso Pero tierno también con lo que Tiende a repetirse, tiende a ser igual De la mano de Dios... Hay días que saber Los días que callar Y sólo escuchar Días de los que huír Perder o descansar Otros que atar Y un día, venga el día, un día que Como todos y como siempre de paso Sea tierno también con lo que Tienda a repetirse, tienda a ser igual De la mano de Dios...