Hay momentos que mi alma está desangelada
Con sus alas rotas, sin cielo y sin patria
Y yo la tengo aquí
En una habitación prestada
Y te busco a la desesperada
Entre los renglones
Es tu voz la que me habla
Y me vence el sueño
Al compás de tus palabras
Pero que bueno
Saber de ti
Que hayas buscado una tregua
Para poderme escribir
Pero que bueno
Saber de ti
Y que dediques un ratito
Solamente para mí
Y encuentro en tu verdad
Esas manos abiertas sobre las que descansar
Y yo me dormiré con el dulce sabor
De que en esta vida
Todo tiene un porqué
Todo tiene su razón de ser
Ciertas noches en las que no me quiero nada
Y me siento eco
Con la sonrisa desgastada
Y me hundo en un dedal
Y vuelvo a resuitar
Si amanezco entre tus cartas
Pero que bueno
Saber de ti
Que hayas buscado una tregua
Para poderme escribir
Pero que bueno
Saber de ti
Y que dediques un ratito
Solamente para mí
Y encuentro en tu verdad
Esas manos abiertas sobre las que descansar
Y yo me dormiré con el dulce sabor
De que en esta vida
Todo tiene su porqué
(Gracias a Adelaida por esta letra)