Otra vida desgarrada por mis manos
Cada vez que azoto tu cabeza
Contra los muros blancos
Que cubren mi mente
Se mancha de tu pútrida sangre
Siento ganas de ahorcarte
Dejar caer tu cuerpo
En un silencioso bosque
Pienso una y otra vez esa idea
Nunca me atrevo a hacerte eso
Porque te quiero
Yo mismo me golpeo
Y ahora que descubro que no puedo
Escapar de este asqueroso cuerpo
Hasta que muera
Lo menos que puedo hacer
Es golpearme una y otra vez
Contra mis muros mentales
Y llenarlos de sudor y sangre...
Esa es la única marca que queda en mi existencia
Porque mi cuerpo jamás será hallado hasta dentro de mil años
Me suicidé a escondidas
Sin nadie que me contemple
Y sólo se olvide de mi
Autodestructor