Inés vive en el bajo de una casa gris y es dependienta en un gran almacen, no tiene a nadie en especial a quien querer, con quien estar y cuando mira alrededor todo parece que está mal. Inés, tiene una sola forma de escapar que es ir al cine, sentarse y soñar con la ilusión de par en par y una sonrisa de emoción prepara el corazón para reir, para llorar,
Inés nunca olvida que el cine le cura todas las heridas, que aquí no hay engaño y la gran mentira todos estos años ha sido su vida que está a la salida para hacerle daño. Inés, desde el momento en que apagan la luz le dice al mundo que la deje en paz, se ha convertido en la mejor, es la más bella del lugar. Buenos y malos por igual.. la adoraron.