Salí una tarde a caminar a darle aire, a mi ansiedad quise olvidarme de consumir que ni el almuerzo salí a comprar. nunca jamás imaginé lo que ésa tarde iba a pasar, bajo de un árbol me recosté, y ví a ésa oruga, mirando me decía: ah- ah- ah- ah- ah- ah- ah- . . . hipnotizado y sin hablar,
me mira fijo, que va a pasar?, detrás de ella venían más, muy decididas a almorzar, decía: ah- ah- ah- ah- ah- ah- ah- . . . todas verdosas, van por detrás, me van llevando a su lugar, es increíble, yo en su mesa, soy su comida, su gran manjar. ah- ah- ah- ah- ah- ah- ah- . . .