Sí, porque el circo siempre se va.
El circo no tiene raíces, no puede tenerlas.
No puede encariñarse con ninguna tierra
Porque hay muchas tierras esperando.
Hay pocos circos y millones de chicos.
Y no debe quedar en el mundo
Ni un solo chico que no haya
Presenciado al menos una vez
La magia inolvidable del circo.
Por eso, porque siempre hay un niño que espera
El circo tiene prisa y esté donde esté
Se marcha una noche dejando su huella
Para amanecer en otra ciudad.
Ya sobre la explanada
Hasta el cielo, la luna
Gritando en las fachadas
Y luces segadoras
El circo se levanta y sube otra giganta
Y vas adelante, siempre ambulante,
En un constante andar.
De los payasos y bravos domadores,
Muchos, muchos aplausos además
Con los leones, elefantes sifones
Y algún malabarista sin igual.
Equilibristas, valientes trapecistas
Que juntos en la pista los verán
Cruzar de un lado a otro
Con toda su alegría y su gran fantasía
Aquí está.
El circo por caminos llevó trayendo
Para ti lo mejor,
Gitanos voladores, payasos domadores
Y un mundo de colores de amor.
Esto es el circo que enseñó su cantar.
El circo viene, pasa y se va.
Vez algo en los ojos,
Sueños de globos rojos
El circo cantando se va.
Lleva en su limón valor
Ecos de tu niñez
Lleva prendido el corazón
Que le diste al despedirte
al compás de su canción.
El circo enseñó su cantar
El circo viene, pasa y se va
Dejando en tu garganta
La calle que te canta,
El circo cantando se va.
El circo enseño su cantar
El circo viene, pasa y se va
Dejando en tu garganta
La calle que te canta
El circo cantando se va
Se va el circo,
Se va el circo
El circo, el circo se va.