Tu tiempo de amor será para ti
el día que tenga una casa.
Tu campo feliz, un cielo de abril
y un aire que respirar.
Un trozo de pan, un lecho de amor
y un árbol para cuidar.
Tendremos la fe del que quiere dar
su vida en el amor sin pedir nada mas
la verdad en la piel y en el alma el calor
y la dicha en la frente.
Veremos nacer la lluvia y la flor
el día que tenga una casa.
Y todo mi amor será para ti
la noche y el despertar.
Las horas de luz, la noche de azul,
y el tiempo junto al hogar.
Y el beso feliz del que quiere dar
su vida en el amor sin pedir nada mas
la verdad en la piel y en el alma el calor
y la dicha en la frente.
El sol brillará tan solo por ti
el día que tenga una casa.
Y en una pared, un viejo reloj
las horas olvidará.
Podremos hablar, podremos vivir
muy lejos de la ciudad.
Tendremos la fe del que quiere dar
su vida en el amor sin pedir nada mas
la verdad en la piel y en el alma el calor
y la dicha en la frente.
El día que tenga una casa.