Tu mirada serena, tus manos blancas,
tu perfume de rosas, como siempre,
tus cabellos tan suaves, tu sonrisa
y ese blanco impecable de tus dientes,
tu silencio profundo, tu mirada
hoy me dicen te quiero, como siempre
y de nuevo la tarde que se marcha
y de nuevo esas luces que se encienden
y esa calle vacía que se queda
y esos niños que duermen.
Y tú y yo habremos inventado un día mas
la fórmula secreta del amor,
el juego que una vez nos empeñamos en ganar.
Y tú y yo seremos unos locos otra vez
volviendo lo derecho del revés
dejando a nuestro amor vivir en libertad.
Tus pequeñas historias y tus problemas,
tus pequeños detalles, como siempre
tu oídos atentos cuando hablo
y esa paz infinita de tu frente
el calor de tu cuerpo que me llama
y me arrastra a tu lado, como siempre
esos rayos de luna que me abrazan
y acarician mi noche, como siempre
y el calor de la calle que se apaga
y esos niños que duermen.
Y tú y yo habremos inventado un día mas
la fórmula secreta del amor,
el juego que una vez nos empeñamos en ganar.
Y tú y yo seremos unos locos otra vez
volviendo lo derecho del revés
dejando a nuestro amor vivir en libertad.
Y tú y yo seremos unos locos otra vez
volviendo lo derecho del revés
dejando a nuestro amor vivir en libertad.
Y tú y yo seremos unos locos otra vez
volviendo lo derecho del revés
dejando a nuestro amor vivir en libertad.