Días que pasan así, sin más ni más,
contemplando la lluvia al caer
en el cristal.
Nubes pintadas de gris se van, se van
y en el campo se escucha el gorrión
cantar, cantar.
Allí
donde el hombre y la mies se madura al sol
donde luce el candil y se para el reloj
donde brilla la luz y se duerme la noche.
Tierra marrón, paredes de cal
primavera sin sol, visitantes de bar,
aprendices de amor, labradores marchar
y campanas de iglesia.
Mi lugar,
mi verdad,
mi calor.
Y unas mujeres al sol, lavar, lavar
una bota de vino, un zurrón
y andar, andar.
Una caricia de amor,
temblar, temblar
y unos labios que quieren reir
para olvidar.
Allí
donde el hombre y la mies se madura al sol
donde luce el candil y se para el reloj
donde brilla la luz y se duerme la noche.
Tierra marrón, paredes de cal
primavera sin sol, visitantes de bar,
aprendices de amor, labradores marchar
y campanas de iglesia.
Mi lugar,
mi verdad,
mi calor.