Subo a la casa del árbol Y no estás, no hay nadie Bajo a la orilla del lago Y no estás, no hay nadie Sucia lluvia de ceniza Mares, océano imposible De ventanas encendidas Y coches estrellados No hay nadie en la avenida Donde nos encontramos No hay nadie en la esquina Donde nos olvidamos En la helada periferia No queda nada
Conduzco al otro lado Y no veo a nadie En la Antártida... La Antártida... Ayer es demasiado tiempo Hoy es tiempo de observar Cabeza abajo ese cielo De nubes rotas flotando Sucia lluvia de ceniza Mares, oceano imposible De ventanas encendidas Y coches estrellados En la Antártida... La Antártida...