Ningún poder se ha podido imponer sobre el poder de la propia razón.
Ningún poder se ha podido imponer sobre el poder de la propia razón.
Ningún Dios, ninguna religión hace al hombre más libre, ni lo aleja del dolor.
Nadie que de verdad crea en Dios puede creer en si mismo, porque Dios en si mismo es la negación...
Dios, es la negación de toda razón.
Dios no es principio de nada, tan solo es una ilusión.
Sólo, sólo, sólo es una ilusión.
Una ilusión tan ficticia como lo es toda ilusión.
Sólo, sólo, sólo es una ilusión.
Un símbolo de opresión. Un símbolo de opresión.
Sólo, sólo, sólo es una ilusión.
Es una fantasía creada, es una fantasía obligada.
Nada vive si no existe.
La fe no es otra cosa que una expresión de pánico y de debilidad.
Es una invitación a perderse en Dios.
A engañar y a engañarse en su nombre.
En el nombre de Dios.
Dios es la negación de toda razón.
Dios no es principio de nada, tan solo es una ilusión. Sólo, sólo, sólo es una ilusión.
Una ilusión tan ficticia como lo es toda ilusión.
Sólo, sólo, sólo es una ilusión.
Un símbolo de opresión, un símbolo de opresión.
Sólo, sólo, sólo es una ilusión. Es una fantasía creada. Es una fantasía obligada.
Dios es una ilusión, dios es una ilusión.
Un invento más, un invento más.
Un sueño del que despertar, un invento más.
Un invento más. Un sueño del que despertar.
Un invento más. Otro invento más.
Un sueño del que despertar. Un invento más.
Otro invento más, un sueño del que despertar