oh! Que gran decepción hoy al abrir los tarros que habíamos guardado y cuidado con tanto amor descubrimos que el almíbar sabía muy mal el cristianismo de estas guindas no se pudo conservar. Y devolvimos todo y nos sentimos mal nos aburrimos tanto es que está todo mal Sirvamos bien la mesa dispuestos a tragar probemos estos manjares que nos saben a maldad una pizca de hierba, para poder olvidar para poder aguantar las ganas de asesinar.
Madre escuchaste a los niños cantar y recordaste lo que no querías recordar estas legumbres que vamos a comer saben igual que las balas que tuviste que tragar sin querer. Eugenia, hay porotos con longaniza en el refrigerador sirvamos bien la mesa y sentémonos a cenar probemos estas frutas que nos saben a maldad, tanta maldad dejemos que nuestras tripas se contaminen con el sabor real