Siempre encontrábamos el modo De darle un tono diferente A cada noche cada día Algo excitante siempre había Para los dos Siempre encontrábamos el tiempo Para besar la fantasía Hacer al cuenta regresiva Y despegarnos del planeta De la rutina Pero un mal día de pronto el sol palideció Frente al espejo notamos que algo cambió Se había esfumado la magia de aquel amor
En nuestras caras ya no había alegría Pero de pronto el silencio sus manos tendió Para cubrirnos el alma y callarnos la voz Como un candil poco a poco se nos apagó La llama viva de nuestra alegría Se fue el amor Sin dejar rastros Y fue imposible poder rescatar Porque jamás volvimos a encontrarlo Se fue, como llegó Sin avisarnos