Me perdí en las calles más estrechas de tu gran ciudad,
Esas que huelen a s**o.
Y las prostitutas prometían
Que iban a quitar todo el frío de mi cuerpo.
Y esta noche no, prefiero el fuego de una hoguera.
Y esta noche no, no habrá quien me quite el frío.
Me perdí en las calles más estrechas de tu gran ciudad,
Esas que huelen a vicio.
Y todos vendían veneno de alta calidad, pero ya tenía.
Y busqué en los bares algo con tu firma,
Algún letrero guarro de esos que se ponen en los lavabos
Y bebí sin freno ni conocimiento
Hasta que tiré todo el vinagre que llevaba dentro.