Música: Q. Portet/M. García García-Perez Letra: Q. Portet En la niebla del anochecer mora el ángel de la confusión. ¡Oh!, dulce y cruel invierno. Y en la triste hora de marchar tras la tregua que el amor me da ¡oh! con tus besos. ¡Oh! ¡oh! Vuelve la risa rara, la risa del dolor, pesadilla en color que arruga mi guitarra, mi hermana. Vuelve el ventilador que me despeina el alma, y la autopista gris donde se estrecha el fin de semana.
Solo, en la niebla de la noche, de tus besos. Vuelta al caos y a la confusión, no me mientas, que no sé mentir sin ensayar. Madrugada: hora de marchar tras la tregua que el amor me da. Y estoy lejos, en la niebla de la noche de tus besos. La risa del dolor ríe sola en mi cara, pesadilla en color que azuza mi guitarra, mi hermana. Vuelve el ventilador que me despeina el alma, y la autopista gris donde se estrecha el fin de semana.