Qué estamos esperando, para recibir amor.
Yo comprendo tu llanto, la vida y el dolor.
Me ha tomado el tiempo, para vernos otra vez,
duérmanse un poquito, y recíbanme.
Con los ojos cerrados, me ves mejor.
Cómo amo sus caras, aunque a veces me den temor,
estoy parado en el medio de la vida.
Y aquí yo me siento muy muy bien,
aunque me echen, me peguen, o me reten.
Y yo sé que todos, son igual a mí.
El alma sus ojos, sus manos, son igual a mí.