De negro pintadas las puertas de Los que viven con esta maldición El flagelante destroza sus cuerpos De herejes, y no hay perdón En hijos de la muerte, las almas Volverán... Los hijos de la muerte, Ángeles Caerán... Mil trescientos cuarenta y uno Francia esta podrida Castigo de un dios que con Crueldad limpiara sus heridas Perros sarnosos, limpiando las Calles lamiendo la sangre de Muertos La angustia y la muerte pareja de Baile en este festín de los cuervos Tiempos de la negra peste La parca esta sedienta
La desesperanza acompaña al Dolor y la fe se enfrentan ¿Con que morbosa gula La muerte se traga sus almas? Hambre de bestia enferma Que nunca encuentra calma Una coral de niños enfermos Canta la oda del llanto La canción del averno La oración del campo santo El frío sonido de la carreta Cargada de cuerpos muertos Terminaran en la tierra Sembrados... En el jardín del infierno ¡El cura, perdió la fe! El únicos dios es la peste negra Ya no hay a quien temer Solo al dios de la muerte negra