[Verso 1] ¡Hola! Te habla este aspirante a fan Que en ocasiones sonríe con las cosas que se dan Toda una existencia sin dibujar un plan; Y no está bien: se confunde el vino con el pan Y eso no ayuda a la hora de cohabitar con el clan A la larga, uno es percibido como un haragán Molesto es ver cómo todos van Y uno instalado en su vaivén, disfrutando aún del primer disco del Gran Y para cuando un «¿cómo están?» salga empolvado del desván La soledad en terraplén dirá qué tan muy y qué tan tan Resultará que los envueltos por uno en celofán Fugádose habrán. Y muy bien: es el precio del afán Y sí: para tal circunstancia aplica mínimo un refrán; Pero con la realidad no puede uno ponerse tan en su plan Alguna vez habrá de hallarse contento en un mazapán; Aunque bueno, no soy quien; si acaso un barbaján [Estribillo] Mis pasos me llevan Y —creo— los controlo; Me llevo, me llevan Con ellos y solo Me dejo llevar Se dejan llevar; Me dejo, se dejan Me dejo llevar Difícil y fácil Respiro sabiendo Cuán frágil y grácil De un hilo pendo No voy a parar No puedo parar; No voy a, no puedo No voy a parar [Verso 2] Días: parece que pasan en vano Le pienso y… no veo por qué sentirse ufano A pesar de que hip-hop me ha llevado de la mano A veces lo percibo ajeno y, a mí, todavía más enano: Abstraído en la tarea de contar grano por grano; Tratando escribir versos como con tecnología nano; Mientras para los demás soy como el cabo de un nudo gordiano Y al final, me pasa lo que a Margarito: nomás nunca gano De absolutamente nada sirve levantarse temprano; El tiempo es de chicle: confitura pa'l mastique humano Que ¡ah cómo rumia guano! ¡y ni cómo oler el metano! Y eso es una de las de campeonato, como bien dice Marrano
Edificio global y diversificadamente plano Donde viven sin conocerse lo cercano y lo lejano Ha sucedido que se topan en el rellano Y se saludan con gesto ameno. Y qué chido, pero a mí eso no se me hace sano [Estribillo] Mis pasos me llevan Y —creo— los controlo; Me llevo, me llevan Con ellos y solo Me dejo llevar Se dejan llevar; Me dejo, se dejan Me dejo llevar Difícil y fácil Respiro sabiendo Cuán frágil y grácil De un hilo pendo No voy a parar No puedo parar; No voy a, no puedo No voy a parar [Verso 3] Ve qué suave se la llevan lo geométrico y lo orgánico No todo había de ser caminar sobre magma volcánico O calcular el grado de influjo satánico En el espacio escénico. Nos separa un trecho oceánico Puedo coexistir en paz con cualquier ideal mesiánico Siempre y cuando no Suban el volumen a su sermón mecánico No se me da el esfuerzo titánico; Por ende, pediré que le bajen, pero usando un cortés tono vesánico Sentiríame como Roma invadida por pueblo germánico Si me sometiese al yugo de un credo tiránico Que absorbiera mi palabra y mente de cuño hispánico En su monólogo ecuménico: una especie de estéril trance chamánico Prefiero encarnar desecho inorgánico Antes que ser radiante girasol de su jardín botánico Pero en fin, que no cunda el pánico; Y a dejar pa' luego el arsénico: disfrutad de este dulce timpánico [Estribillo] Mis pasos me llevan Y —creo— los controlo; Me llevo, me llevan Con ellos y solo Me dejo llevar Se dejan llevar; Me dejo, se dejan Me dejo llevar Difícil y fácil Respiro sabiendo Cuán frágil y grácil De un hilo pendo No voy a parar No puedo parar; No voy a, no puedo No voy a parar