Se acuerdan de Marthita la Piadosa? Se le iban lava y lava las mañanas, Luego iba a trabajar, regresaba a planchar, Y así eran todas, todas las semanas. ¿Se acuerdan de Matilde, que es su hermana? Llegaba ésa a las seis de la mañana, Venía de parrandear, ya no podía ni andar, Era de mucho mundo así llegar. Tenía muchos vestidos para sus veintiocho abrigos Y un día llegó de coche con uno de sus amigos: -Me llevo mis trusiaus, no me digas ni miaus, Ya tengo allá en Las Lomas un penjaus. Marthita quedó sola en su casita, Pero vino el gobierno y se la quita: -Perdone el empujón, pero a este calllejón Le va a pasar el Metro y el camión.
Marthita puso un puesto de tamales Allá por la colonia de Portales; Un inspector llegó y el puesto le tiró: -Perdone, pero afeaba aquí la calle.. En cambio la Matilde abrió en Polanco Un antro para gente muy moderna; Al vicio los tiró, buena lana sacó: ¡Eso es hacer negocios a go-go! Marthita vendió tacos con su resto de fortuna Y un día le clausuraron porque no cerró a la una; En cambio Matildís puso una casa gris Y cierra cuando quiere la infeliz. Marthita ya está enferma y desahuciada, Matilde está gordota y colorada. Yo le suplico a usted que, si algo pregunté, Si sabe la respuesta me la dé.