A quién le pido pan de noche
a quién le sigo las constantes orbitales
qué derroche de facultades
qué de tacones se exhiben en el escaparate.
A quien secuestro hoy en mi coche
para obtener mi ración de genitales
qué derroche de obviedades
qué mal se ve la libertad desde estos ventan*les.
A quién persigo si me pierdo
para llegar al mismo tiempo
qué derroche de sentimiento
qué bien se me siento cuando fumo
y me engancho al viento.
Cómo me engancho al labio que me da el aliento
en cada beso robado, cómo me engancho al pecho
que me da alimento en cada encuentro afrutado.
No entiendes no quiero tu risa
quiero intercambiar corazones contigo
polvo en la nariz ya no hay prisa
tú quieres que me vaya, que me vaya, dentro de ti.
A quién deduzco de la escena
como probable falsificador de modales
(que indecencia mis verdades)
no se que cosa no daría por ser más amable.
Veo en ti flor de llamas
sol que suma voluntades
que indecencia tempestades
no se que hago aquí volando enganchado al aire.
Cómo me engancho al labio que me da la el aliento
en cada beso robado, cómo me engancho al pecho
que me da alimento en cada encuentro afrutado.
No entiendes no quiero tu risa
quiero intercambiar corazones contigo
polvo en la nariz ya no hay prisa
tu quieres que me vaya, que me vaya, dentro de ti.