Hay veces que aun teniendo la baraja,
Con una carta pierdes la partida, y muchos
De los juegos de las cartas, en algo se parecen
A la vida.
Confiado en las promesas de tus ojos
Confiado en las promesas de tu boca, contigo
Le aposte a una sota de oros, y terminé por ser un
Rey de copas.
Traigo una tercia de penas en el alma, por la
Quintilla de mentiras que dijiste, ya tengo un pocar
De amantes y no basta, para olvidar el
Par de noches que me diste.
Perdi esta mano pero estoy en la jugada
Y volvere por la revancha vida mia,
Al fin y al cabo faltan muchas cara a cara
Y tengo cartas en la mano todavia.
Traigo una tercia de penas en el alma, por la
Quintilla de mentiras que dijiste, ya tengo un pocar
De amantes y no basta, para olvidar el
Par de noches que me diste.