Un viaje de placer, la tina puede ser.
Volteas y tal vez, yo ya no esté.
Resbalas con un pie. El fango de tu piel
si no te lavas bien ya no vendré.
En tus manitas encuentro las caricias
frotando todo el cuerpo
de un recuerdo muerto.
En tu boquita se pierden las cerezas
acuérdate de éstas, calienta mi herida.
Los barcos de tu olor manchados de sudor
se hunden al llegar al corazón.
Tus piernas al revés mi cuello han de tocar
y rozare tus pies, podrás flotar.
En tus manitas encuentro las caricias
frotando todo el cuerpo
de un recuerdo muerto.
En tu boquita se pierden las cerezas
acuérdate de éstas, calienta mi herida.
En tus manitas encuentro las caricias
frotando todo el cuerpo
de un recuerdo muerto.
En tu boquita se pierden las cerezas
acuérdate de éstas, calienta mi herida.