De sobras sabes que eres la primera
Que no miento si juro que daría
Por ti la vida entera
Por ti la vida entera;
Y, sin embargo, un rato, cada día
Ya ves, te engañaría
Con cualquiera
Te cambiaría por cualquiera
Ni tan arrepentido ni encantado
De haberme conocido, lo confieso
Tú que tanto has besado
Tú que me has enseñado
Sabes mejor que yo que hasta los huesos
Sólo calan los besos
Que no has dado
Los labios del pecado
Porque una casa sin ti es una emboscada
El pasillo de un tren de madrugada
Un laberinto
Sin luz ni vino tinto
Un velo de alquitrán en la mirada
Y me envenenan los besos que voy dando
Y, sin embargo, cuando
Duermo sin ti contigo sueño
Y con todas si duermes a mi lado
Y si te vas me voy por los tejados
Como un gato sin dueño
Perdido en el pañuelo de amargura
Que empaña sin mancharla tu hermosura
No debería contarlo y, sin embargo
Cuando pido la llave de un hotel
Y a media noche encargo
Un buen champán francés
Y cena con velitas para dos
Siempre es con otra, amor
Nunca contigo
Bien sabes lo que digo
Porque una casa sin ti es una oficina
Un teléfono ardiendo en la cabina
Una palmera
En el museo de cera
Un éxodo de oscuras golondrinas
Y me envenenan los besos que voy dando
Y, sin embargo, cuando
Duermo sin ti contigo sueño
Y con todas si duermes a mi lado
Y si te vas me voy por los tejados
Como un gato sin dueño
Perdido en un pañuelo de amarguras
Que empaña sin mancharla tu hermosura
Y cuando vuelves hay fiesta
En la cocina
Y bailes sin orquesta
Y ramos de rosas con espinas
Pero dos no es igual que uno más uno
Y el lunes al café del desayuno
Vuelve la guerra fría
Y al cielo de tu boca el purgatorio
Y al dormitorio
El pan de cada día
Y me envenenan los besos que voy dando...