No hay peor argentino que su propio asesino.
No hay argentino mejor si no hay otro peor.
Si no tengo historia ni tengo tradición,
será que no tengo memoria, pues, ni mucho corazón.
Si soy del interior no estoy adentro,
qué futuro me espera si gobiernan desde afuera.
En la Capital combatiendo el capital,
el orgullo nacional es ganar un mundial en la Monumental.
Somos los argentinos en tercera persona,
será que estamos en la lona, que nos quieren boxear.
¿Te digo quiénes son los argentinos de las argentinas?:
Los que se llevaron a ninguna parte o a las Malvinas.
Si las islitas son argentinas y hablan inglés
¿Qué queda para los demás de la parte de atrás?
Somos los argentinos los que nunca vinimos,
y si no me puedo quedar, la luna y el río me van a llorar.
¿Viste cuántos países que ya no existen?
Teníamos por costumbres las costumbres con gran dignidad
y cuatro puntos cardinales, porque menos no es cardinal.
Ese es el punto argentino!