Recién acabamos de empezar a correr
no se puede parar
la segunda parte es mejor
hay que seguir hasta el final
la última estación es opcional.
Cuando en la carretera
se toma cierta velocidad
hay que recordar que la voluntad
sirve para empezar a correr,
no para terminar.
Nacimos para estar en el camino
y el único camino es el porvenir
todo está por venir
mejor curtir el cuero
y supervivir es una buena elección.
Alguna vez todos tuvimos
que agarrarnos del sombrero
porque la tormenta era cruenta
y también hay que convencer
al tilín del corazón.
Mirando pasar el pasado
no me estoy quedando mirando
nada más estoy arrastrando
a mi propia conducción
un envión y otra canción.
No escucho más el propio tilín
de mi cruel Alcatraz cora-moquetín
tengo suficiente super fe
y no se hace desear
el mármol de Plaza San Martín.
Tremenda riqueza poder elegir pero tiene que ser
en verdadera libertad es el verdadero deber
debería ser guardado como el fuego sagrado
que cuida las lapiceras que quieren escribir
y a los grabadores
no existen tiempos mejores
si no existe el tiempo
qué gran evocación.
No se dice es mala una canción,
qué temeridad
acusar de maldad a una canción
buena oportunidad de callar
además sólo existe una canción
la que hace tilín en mi corazón
en Berlín sólo podemos escuchar
porque no queremos oír
porque no hay tiempo
y además acabamos de empezar a correr.
Recién acabamos de empezar
es el tilín del corazón.
No se puede parar una canción
si es el tilín del corazón