Cuando la espuma del mar se agote
Y las hojas tristes abandonen los bosques
Cuando la noche nos cubra en su velo gris
Siempre yo estaré guiando tu camino
En este dulce cementerio de rosas
Donde tu alma encontrará la luz de tu espíritu
Guardo con ternura el amor que profeso
En este sendero nocturno y eterno
Solo nuestras almas cayeron del cielo
En este sendero nocturno