Como cada noche tintinea en el cristal la lluvia oscura
Una nube gris lo envuelve todo y una fuerza nos empuja
Quiero irme lejos de aquí, donde no deba luchar al despertar.
Donde la mañana huela a tierra y el color fruta madura
Y la madrugada sea un rayo desprendido de luna
Campos de lirios y pan en nuestros cuerpos habrá al despertar.
Donde el manantial en libertad y el respirar sin ataduras
Una cinta de agua ceñirá mi corazón por la cintura
Seré la vela en el mar o aquella nube al pasar, al despertar.
Desde la raíz del tronco verde hasta el arroyo nos escucha
Cuentan las pisadas vacilantes, las miradas y las dudas
Hojas de hierba, mirad como cimbrea el trigal, al despertar.
Cuando todo aquello que deseas alcanzar se encuentra lejos
Hay algunas veces que apretando bien los ojos tenemos
Los sueños son de cristal y se nos pueden quebrar al despertar.