Tu beso tembloroso y programa doble, cinco pesetas
en el momento justo nos enchufaban con la linterna.
c*ntos atardeceres por las callejas sin darnos tregua
que distintos los besos cuando pasabas de ir a la escuela.
Del beso aquel de Judas que descubrimos sin darnos cuenta
junto a los corazones atravesados por una flecha.
Cuando tir´ su anillo el agua del rso se volvi negra.
Esto hace treinta y cinco y jamas he vuelto a pisar su acera.
A dnde irn los besos que guardados
que no damos, dnde se va ese abrazo sino llegas nunca a darlo
Dnde irn tantas cosas que juramos un verano.
Bailando con la orquesta prometimos no olvidarnos.
Y el beso que te llega en aquella carta que nunca esperas
como no est firmada miras distinto a las compaeras.
Todo el francs que supe y que sabr nunca fue culpa de ella.
La llamaban Beb y yo la v en ballet de "Se fue a la guerra".