(Canción criolla) La pitada ‘el guardia civil lo pone en hora al pueblo. La gente se recoge en sus casas. Por las calles solas el milico hace su ronda. En un rincón del mostrador, con disimulo se toma una copa. De un trago se la toma. Después sigue. Las noches son siglos. Pita un cigarro y se distrae... ‘que más no sea En el pueblo nunca pasa nada. Pasa que él a veces se acuerda de su vivir de antes. Se vino ‘e la campaña porque tiene hijos en edad escolar, y ahí anda, de uniforme y lata. Pero él adentro está entero, el hombre que hay en él brilla sin galones. A ése no lo pueden mandar. ¡Salú’, hermano!* El milico con su pito Ya les prende los faroles Noche, noche Despierto queda el boliche Envejeciendo en alcoholes** Caña, caña Te refalás por el fondo Bebedor de un trago solo Milico, milico Uniforme que te duele A vos, que sos como todos Hombre, hombre Que todos te son iguales Si te toca proceder Hermano, hermano En las horas de la ronda
¡si habrá cosas que pensar! Solo, solo Levantándose en la noche Perros, gallo y rocío Madrugada, madrugada En lo que tenés adentro Nadie te puede mandar Milico, milico Lairarai, lararaira... ¡Nadie te puede mandar! * En la versión de Alfredo Zitarrosa: La pitada del guardia civil lo pone en hora al pueblo. La gente se recoge en sus casas. Por las calles solas, el milico hace su ronda. En un rincón del mostrador, con disimulo, se toma una copa; de un trago se la toma. Después sigue. Las noches son siglos. Pita un cigarro y se distrae, aunque más no sea, porque en el pueblo nunca pasa nada. Pasa que él a veces se acuerda de su vida de antes. Se vino de campaña para que los botijas vayan a la escuela, y ahí anda, de uniforme y lata. Pero él adentro está entero, el hombre que hay en él brilla sin galones. A ése no lo pueden mandar. ¡Salú’, hermano! ** Alfredo Zitarrosa dice “el alcohol” (Los textos en cursiva corresponden a partes recitadas)