Viajando al interior de su mirada He encontrado una lágrima perdida, Atónito la vi desorientada Tratando de encontrar una salida. Antigua era a juzgar por su apariencia Quizás fuera un dolor no superado O acaso un arrebato de inconsciencia Pendiente en los archivos del pasado. La invité a compartir mi trayectoria, La lágrima aceptó y fuimos juntos Visitamos amores sin historia Y alguna decepción entre otros puntos. Pasamos un cultivo de proyectos Y luego por un campo de ilusiones, Desde allí decidimos ir directo Al centro visceral de las pasiones. Al verse ante el despojo de un olvido La lágrima tornose llanto intenso, A veces las pasiones dan motivo De abusos en amores indefensos. De pronto una luz incandescente Nos pidió de seguirla muy despacio Intensa era muy blanca y transparente Una pluma flotando en el espacio. Soy el alma, afirmó, de esta criatura Sin mi luz ella nunca existiría Yo soy quien abastece su ternura Y su amor y su fe y su alegría. Después de deambular por tantos lados Volvimos otra vez a su mirada, Encontramos los párpados cerrados Dormía al parecer despreocupada. Concluye aquí la crónica del viaje Que hicimos a través de su mirada Una lágrima y yo por el paisaje Del alma y los sentires de mi amada.